lunes, 21 de diciembre de 2009
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ESTE BLOG ESTA DEDICADO PARA TODOS MIS COLEGAS Y AMIGOS, LES DEJAMOS ALGUNOS LIBROS Y ARTICULOS EN DESCARGA DIRECTA, ESPERO LES SIRVAN DE MUCHO. SALUDOS DIEGO CAMPOS J.
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CUIDADO DENTAL
La mayor parte de la población no se cepilla después de cada comida, y casi la mitad no lo hace ni siquiera dos veces por día, pero las estadísticas muestran que las mujeres toman un poco más en serio el cuidado de sus dientes que los hombres.
Además, son más las mujeres que tienen un dentista estable al que visitan con regularidad, que los hombres.
Es cierto, también, que el cuidado dental se ha ganado un lugar en la rutina en los últimos años, con más adultos que realmente entienden su importancia y, por lo tanto, la transmiten a sus hijos (siempre con las mujeres siendo más importantes en este rubro). Pero también es cierto que los números demuestran que no todos los adultos entienden la importancia del cuidado dental ni se cuidan de la forma en que deberían hacerlo.
Lo irónico es que prevenir problemas en los dientes es realmente muy simple, si se tiene un poco de conciencia y voluntad como para mantener una rutina higiénica establecida y respetada a diario. En general, con el lavado y el uso de hilo dental y/o palillos, sumado a las visitas regulares al dentista (con chequeos regulares como si del médico de cabecera se tratara) y a una alimentación correcta, alcanza para mantener una sonrisa saludable.
Así que, unos cuantos consejos no parecen fuera de lugar:
-Lavarse los dientes por lo menos dos veces por día, con una pasta dental que contenga flúor.
-Limpiar el espacio entre los dientes con hilo dental o con un palillo diseñado especialmente para este espacio. Las bacterias que causan las caries permanecen en los espacios entre los dientes aun después de que nos hemos pasado el cepillo, ya que este no llega realmente a penetrar en profundidad. Además, pequeños pedazos de comida pueden también escapar al cepillado. El hilo dental remueve placa y comida de entre los dientes y debajo la línea de la encía.
-Dieta balanceada y con pocos bocadillos entre comidas (para prevenir que quede comida entre los dientes mucho tiempo sin cepillarnos).
-Visitas regulares al dentista para limpiezas profesionales y chequeos generales de toda la dentadura.
Además, son más las mujeres que tienen un dentista estable al que visitan con regularidad, que los hombres.
Es cierto, también, que el cuidado dental se ha ganado un lugar en la rutina en los últimos años, con más adultos que realmente entienden su importancia y, por lo tanto, la transmiten a sus hijos (siempre con las mujeres siendo más importantes en este rubro). Pero también es cierto que los números demuestran que no todos los adultos entienden la importancia del cuidado dental ni se cuidan de la forma en que deberían hacerlo.
Lo irónico es que prevenir problemas en los dientes es realmente muy simple, si se tiene un poco de conciencia y voluntad como para mantener una rutina higiénica establecida y respetada a diario. En general, con el lavado y el uso de hilo dental y/o palillos, sumado a las visitas regulares al dentista (con chequeos regulares como si del médico de cabecera se tratara) y a una alimentación correcta, alcanza para mantener una sonrisa saludable.
Así que, unos cuantos consejos no parecen fuera de lugar:
-Lavarse los dientes por lo menos dos veces por día, con una pasta dental que contenga flúor.
-Limpiar el espacio entre los dientes con hilo dental o con un palillo diseñado especialmente para este espacio. Las bacterias que causan las caries permanecen en los espacios entre los dientes aun después de que nos hemos pasado el cepillo, ya que este no llega realmente a penetrar en profundidad. Además, pequeños pedazos de comida pueden también escapar al cepillado. El hilo dental remueve placa y comida de entre los dientes y debajo la línea de la encía.
-Dieta balanceada y con pocos bocadillos entre comidas (para prevenir que quede comida entre los dientes mucho tiempo sin cepillarnos).
-Visitas regulares al dentista para limpiezas profesionales y chequeos generales de toda la dentadura.
EL CHUPON
Desventajas del chupón
Frente a los beneficios del chupón, hay una serie de riesgos que hacen que debamos ser prudentes con su uso.
- Interferencia con la lactancia materna. El patrón de succión del chupón es diferente al de la succión del pezón, de modo que el uso del chupón puede dificultar la adquisición de la técnica para la lactancia materna. Por otro lado, el niño que satisface parte de sus necesidades de succión con métodos no nutritivos estimula durante menos tiempo el pezón materno, y con esto, disminuye la producción de leche, y el niño está más hambriento e irritable, lo que obliga a los padres a introducir la lactancia artificial.
Por este motivo, se recomienda no iniciar el uso del chupón antes de los 15 días de vida, o hasta que la lactancia materna esté bien establecida.
- Maloclusiones dentarias. Los hábitos de succión no nutritiva se han relacionado con deformidades de la boca. Estos problemas muchas veces se resuelven solos al suspender el uso del chupón.
Sin embargo, su empleo después de los 3 años de edad puede ocasionar deformidades más permanentes que requieran de la intervención de un odontopediatra. El uso prolongado del chupón también se ha relacionado con la aparición de caries dentales, debido a la permanencia en el chupón de restos de alimento.
- Otitis media aguda. El chupón puede favorecer el paso de bacterias de la nariz y la garganta al oído medio a través de las llamadas trompas de Eustaquio, aumentando el riesgo de otitis. Esto ocasiona que muchos pediatras recomienden restringir el uso del chupón a los primeros 10 meses de vida, cuando la necesidad de succión es mayor y la otitis media aguda es más infrecuente.
- Accidentes. En caso de caída accidental, el borde del escudo de plástico rígido del chupón puede ocasionar heridas al chocar con la cara del niño. Por otro lado, el uso de collares para colgarlo del cuello es muy peligroso, pudiendo provocar la estrangulación. Por último, la aspiración de una parte del chupón, con la consiguiente obstrucción de las vías respiratorias, es otro posible accidente relacionado con este hábito.
Balance
Chupón ¿sí o no?El uso del chupón como elemento reconfortante para el bebé es una práctica enormemente extendida
No suele faltar en la canastilla del recién nacido, y generalmente se estrena en las primeras horas o días de vida. Su principal beneficio es el efecto tranquilizante para el bebé, pero también tiene efectos negativos, como el posible fracaso de la lactancia materna o las alteraciones dentarias.
Succión no nutritiva
El recién nacido tiene el reflejo de succión, que le permite alimentarse, pero además le calma y le reconforta. La succión de los dedos, el chupón u otros objetos no nutritivos constituye una actividad normal en el desarrollo del niño. Se inicia ya en el útero y persiste hasta el año de edad, siendo más habitual durante los primeros meses de vida.
El uso del chupón para calmar el deseo de succionar del bebé es una práctica muy habitual en nuestra sociedad, y un recurso de gran ayuda en niños con cólicos y muy irritables. No obstante, no debe recurrirse al chupón cada vez que el niño llore.
El llanto es una de las principales maneras que tiene el bebé para comunicarse, y puede indicar diferentes tipos de necesidades. Debemos tratar de identificarlas, además de probar con otros métodos para reconfortarle, como hablarle, mecerle o jugar con él.
Desventajas del chupón
Frente a los beneficios del chupón, hay una serie de riesgos que hacen que debamos ser prudentes con su uso.
- Interferencia con la lactancia materna. El patrón de succión del chupón es diferente al de la succión del pezón, de modo que el uso del chupón puede dificultar la adquisición de la técnica para la lactancia materna. Por otro lado, el niño que satisface parte de sus necesidades de succión con métodos no nutritivos estimula durante menos tiempo el pezón materno, y con esto, disminuye la producción de leche, y el niño está más hambriento e irritable, lo que obliga a los padres a introducir la lactancia artificial.
Por este motivo, se recomienda no iniciar el uso del chupón antes de los 15 días de vida, o hasta que la lactancia materna esté bien establecida.
- Maloclusiones dentarias. Los hábitos de succión no nutritiva se han relacionado con deformidades de la boca. Estos problemas muchas veces se resuelven solos al suspender el uso del chupón.
Sin embargo, su empleo después de los 3 años de edad puede ocasionar deformidades más permanentes que requieran de la intervención de un odontopediatra. El uso prolongado del chupón también se ha relacionado con la aparición de caries dentales, debido a la permanencia en el chupón de restos de alimento.
- Otitis media aguda. El chupón puede favorecer el paso de bacterias de la nariz y la garganta al oído medio a través de las llamadas trompas de Eustaquio, aumentando el riesgo de otitis. Esto ocasiona que muchos pediatras recomienden restringir el uso del chupón a los primeros 10 meses de vida, cuando la necesidad de succión es mayor y la otitis media aguda es más infrecuente.
- Accidentes. En caso de caída accidental, el borde del escudo de plástico rígido del chupón puede ocasionar heridas al chocar con la cara del niño. Por otro lado, el uso de collares para colgarlo del cuello es muy peligroso, pudiendo provocar la estrangulación. Por último, la aspiración de una parte del chupón, con la consiguiente obstrucción de las vías respiratorias, es otro posible accidente relacionado con este hábito.
RECOMENDACIONES...
- No debes iniciar su uso antes de los 15 días de vida, hasta que la lactancia materna esté bien establecida, para así no interferir con ella.
- Es recomendable comenzar a restringir su uso a partir de los 8 ó 10 meses, y suprimirlo hacia el año de vida.
- A la hora de dejar el chupón, hay que ayudar al niño a que lo haga de modo voluntario, sin métodos drásticos ni traumas.
- Sólo deben emplearse aquellos chupones que cumplan con las normas de seguridad. Estos son de una sola pieza, tienen una base lo suficientemente grande para impedir que todo el chupón pueda entrar en la boca del niño y llevan una anilla para poder tirar de él y sacarlo.
- No se debe colgar el chupón del cuello, la muñeca, o la cuna del bebé, para evitar accidentes.
Frente a los beneficios del chupón, hay una serie de riesgos que hacen que debamos ser prudentes con su uso.
- Interferencia con la lactancia materna. El patrón de succión del chupón es diferente al de la succión del pezón, de modo que el uso del chupón puede dificultar la adquisición de la técnica para la lactancia materna. Por otro lado, el niño que satisface parte de sus necesidades de succión con métodos no nutritivos estimula durante menos tiempo el pezón materno, y con esto, disminuye la producción de leche, y el niño está más hambriento e irritable, lo que obliga a los padres a introducir la lactancia artificial.
Por este motivo, se recomienda no iniciar el uso del chupón antes de los 15 días de vida, o hasta que la lactancia materna esté bien establecida.
- Maloclusiones dentarias. Los hábitos de succión no nutritiva se han relacionado con deformidades de la boca. Estos problemas muchas veces se resuelven solos al suspender el uso del chupón.
Sin embargo, su empleo después de los 3 años de edad puede ocasionar deformidades más permanentes que requieran de la intervención de un odontopediatra. El uso prolongado del chupón también se ha relacionado con la aparición de caries dentales, debido a la permanencia en el chupón de restos de alimento.
- Otitis media aguda. El chupón puede favorecer el paso de bacterias de la nariz y la garganta al oído medio a través de las llamadas trompas de Eustaquio, aumentando el riesgo de otitis. Esto ocasiona que muchos pediatras recomienden restringir el uso del chupón a los primeros 10 meses de vida, cuando la necesidad de succión es mayor y la otitis media aguda es más infrecuente.
- Accidentes. En caso de caída accidental, el borde del escudo de plástico rígido del chupón puede ocasionar heridas al chocar con la cara del niño. Por otro lado, el uso de collares para colgarlo del cuello es muy peligroso, pudiendo provocar la estrangulación. Por último, la aspiración de una parte del chupón, con la consiguiente obstrucción de las vías respiratorias, es otro posible accidente relacionado con este hábito.
Balance
Chupón ¿sí o no?El uso del chupón como elemento reconfortante para el bebé es una práctica enormemente extendida
No suele faltar en la canastilla del recién nacido, y generalmente se estrena en las primeras horas o días de vida. Su principal beneficio es el efecto tranquilizante para el bebé, pero también tiene efectos negativos, como el posible fracaso de la lactancia materna o las alteraciones dentarias.
Succión no nutritiva
El recién nacido tiene el reflejo de succión, que le permite alimentarse, pero además le calma y le reconforta. La succión de los dedos, el chupón u otros objetos no nutritivos constituye una actividad normal en el desarrollo del niño. Se inicia ya en el útero y persiste hasta el año de edad, siendo más habitual durante los primeros meses de vida.
El uso del chupón para calmar el deseo de succionar del bebé es una práctica muy habitual en nuestra sociedad, y un recurso de gran ayuda en niños con cólicos y muy irritables. No obstante, no debe recurrirse al chupón cada vez que el niño llore.
El llanto es una de las principales maneras que tiene el bebé para comunicarse, y puede indicar diferentes tipos de necesidades. Debemos tratar de identificarlas, además de probar con otros métodos para reconfortarle, como hablarle, mecerle o jugar con él.
Desventajas del chupón
Frente a los beneficios del chupón, hay una serie de riesgos que hacen que debamos ser prudentes con su uso.
- Interferencia con la lactancia materna. El patrón de succión del chupón es diferente al de la succión del pezón, de modo que el uso del chupón puede dificultar la adquisición de la técnica para la lactancia materna. Por otro lado, el niño que satisface parte de sus necesidades de succión con métodos no nutritivos estimula durante menos tiempo el pezón materno, y con esto, disminuye la producción de leche, y el niño está más hambriento e irritable, lo que obliga a los padres a introducir la lactancia artificial.
Por este motivo, se recomienda no iniciar el uso del chupón antes de los 15 días de vida, o hasta que la lactancia materna esté bien establecida.
- Maloclusiones dentarias. Los hábitos de succión no nutritiva se han relacionado con deformidades de la boca. Estos problemas muchas veces se resuelven solos al suspender el uso del chupón.
Sin embargo, su empleo después de los 3 años de edad puede ocasionar deformidades más permanentes que requieran de la intervención de un odontopediatra. El uso prolongado del chupón también se ha relacionado con la aparición de caries dentales, debido a la permanencia en el chupón de restos de alimento.
- Otitis media aguda. El chupón puede favorecer el paso de bacterias de la nariz y la garganta al oído medio a través de las llamadas trompas de Eustaquio, aumentando el riesgo de otitis. Esto ocasiona que muchos pediatras recomienden restringir el uso del chupón a los primeros 10 meses de vida, cuando la necesidad de succión es mayor y la otitis media aguda es más infrecuente.
- Accidentes. En caso de caída accidental, el borde del escudo de plástico rígido del chupón puede ocasionar heridas al chocar con la cara del niño. Por otro lado, el uso de collares para colgarlo del cuello es muy peligroso, pudiendo provocar la estrangulación. Por último, la aspiración de una parte del chupón, con la consiguiente obstrucción de las vías respiratorias, es otro posible accidente relacionado con este hábito.
RECOMENDACIONES...
- No debes iniciar su uso antes de los 15 días de vida, hasta que la lactancia materna esté bien establecida, para así no interferir con ella.
- Es recomendable comenzar a restringir su uso a partir de los 8 ó 10 meses, y suprimirlo hacia el año de vida.
- A la hora de dejar el chupón, hay que ayudar al niño a que lo haga de modo voluntario, sin métodos drásticos ni traumas.
- Sólo deben emplearse aquellos chupones que cumplan con las normas de seguridad. Estos son de una sola pieza, tienen una base lo suficientemente grande para impedir que todo el chupón pueda entrar en la boca del niño y llevan una anilla para poder tirar de él y sacarlo.
- No se debe colgar el chupón del cuello, la muñeca, o la cuna del bebé, para evitar accidentes.
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